8 nuevas habitaciones individuales que permiten seguir los cuidados neonatales con intimidad y tranquilidad
Nuestro servicio se caracteriza por una escucha activa hacia las necesidades de la mujer. Somos un equipo de profesionales jóvenes que tiene en cuenta la capacidad de decisión, respeto y empoderamiento como los valores que nos definen junto a una voluntad transformadora hacia una medicina más humanizada.
Ser respetuosos con la mujer y otorgarle el protagonismo que merece es la voluntad del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Universitario MútuaTerrassa (HUMT), quien trabaja con voluntad transformadora -conjuntamente con el Servicio de Pediatría- para poner en valor un trato más humanizado que repercuta en la figura de la mujer así como en su bebé y entorno más inmediato.
Integrado por un equipo de profesionales joven y comprometido, el servicio en cuestión trabaja con la premisa de escuchar los requerimientos de la mujer y respetar al máximo tanto su cuerpo como sus decisiones. Con un trato muy accesible, todos ellos están implicados con el bienestar y seguridad de sus pacientes y alineados hacia la conveniencia de promover una medicina más cercana.
Partos respetados, embarazadas empoderadas
El Servicio de Ginecología y Obstetricia es especialmente sensible durante el proceso del embarazo y específicamente en el momento del parto. En este sentido, tanto el procedimiento de dilatación como el propio parto se lleva a cabo en el mismo espacio y siempre preservando al máximo la intimidad de la pareja. Una muy baja tasa de episiotomías y una cesárea del todo respetada corroboran la consideración del servicio hacia la mujer y su cuerpo.
El estrecho vínculo entre la madre y el bebé es otro de sus rasgos definitorios ya que en ninguna circunstancia se opta por separarlos, siempre que las condiciones clínicas lo permitan. La práctica del “piel con piel” se implementa en todos los casos con los múltiples beneficios que se derivan: facilitar el desarrollo de la lactancia, estabilizar la frecuencia cardíaca del bebé, ayudar a la regulación de la temperatura, promover el establecimiento del vínculo afectivo y, en definitiva, disminuir el estrés del parto.
Los partos de bajo riesgo están liderados por comadronas y todas las madres cuentan con un apoyo específico al amamantamiento materno, incluidos los casos más complejos ya que se abordan con profesionales expertos. Los cuidados neonatales se realizan en la misma habitación -de acuerdo con el criterio de mantener el nexo entre la madre y el bebé- y éstas son siempre individuales y están equipados con cunas de colecho y servicio propio. Además, mediante el circuito de alta precoz, se favorece el regreso a casa de la madre y el bebé en un período máximo de 48h y coordinado con una matrona a domicilio para realizar el seguimiento posparto.