¿Cómo puedo prevenir la Toxoplasmosis durante el embarazo?

Durante el primer mes de embarazo el equipo obstétrico (equipo de ginecología y equipo comadrona) solicitará que te hagas una analítica para obtener información sobre los anticuerpos o infecciones que puedas tener, entre estos comprobar la presencia de los anticuerpos de la toxoplasmosis. La toxoplasmosis es una zoonosis que se puede transmitir al feto verticalmente cuando una embarazada tiene una infección aguda provocada por este protozoo. Se trata de un parásito que puede vivir dentro de las células de los seres humanos y los animales, sobre todo de los gatos y de los animales de granja.

Excepto en casos de inmunodepresión grave, sólo hay riesgo de transmisión vertical de la enfermedad en la primoinfección materna. Lo que lo hace peligroso es que se trata de un organismo que puede atravesar la placenta, por lo tanto la afectación al feto se produce por la infección de la placenta y puede tener causas graves como causar graves alteraciones postnatales o producir la muerte intrauterina.

El riesgo de la afectación fetal está en relación directa con el momento de la infección materna, durante el primer trimestre, la infección tendrá consecuencias mucho más graves, pero el riesgo de transmisión es más bajo. En cambio durante el tercer trimestre, el riesgo de transmisión es muy alto, pero la gravedad de las lesiones fetales es mucho menor.

En la mayoría de los casos de infección son asintomáticos y en el caso de presentar algún síntoma, estos son de corta duración y similares a una gripe común, por lo tanto muchas mujeres no son conscientes de padecer la infección.


Los gatos y el riesgo de padecer toxoplasmosis

Lejos de lo que se pueda pensar el contagio no se produce por el contacto con un gato, una embarazada puede tocar y acariciar un gato.

El gato contrae la enfermedad si come carne cruda infectada con el parásito, este parásito se multiplica en los intestinos del animal y por lo tanto está presente en las heces, que contaminará la tierra y, como consecuencia, la fruta y las verduras que se cultiven, las cuales serán fuente de contagio de otros animales. También se ha descrito la transmisión de la infección por diversos vectores, como moscas u otros insectos, o bien por el contacto entre mano no contaminada y mano contaminada (por la manipulación de carnes, alimentos o tierra con ooquistes y la mucosa bucal). Pero si el gato no está infectado y no sale de casa, ni come carne cruda ni tampoco está en contacto con otros animales que puedan ser portadores, no tiene porque infectarse.

Para evitar riesgos de sufrir la Toxoplasmosis se debe evitar el contacto con gatos (desconocidos o incluso gatos conocidos, pero que tienen contacto con otros no conocidos) y con todos los materiales que puedan estar contaminados con sus heces. Como también tener precaución durante la manipulación de la tierra con heces de gato, ya que se recomienda utilizar guantes y realizar una buena higiene de las manos después de cualquier contacto.

La prevención se centra en una buena higiene y una dieta correcta

  • No ingerir carne cruda o contaminada. Se debe consumir la carne y los productos cárnicos bien cocidos (a altas temperaturas> 70-80º).
  • Hay que utilizar guantes, cuando se manipule carne y lavarse las manos con agua caliente y jabón, después de la manipulación de la misma.
  • Hay que evitar, durante la manipulación de la carne cruda u otros alimentos crudos, el contacto de las manos con la mucosa bucal o de los ojos.
  • Se deben mantener muy limpios los utensilios que se utilicen para la manipulación de la carne y alimentos crudos.
  • Los embutidos y carnes curadas también pueden contener el parásito.
  • La congelación a bajas temperaturas (<-18º durante> 48 horas) también destruye los ooquistes del parásito.
  • Deben utilizarse guantes siempre que se manipule tierra, ya sea en el campo como en el huerto o el jardín.
  • Las frutas y verduras que se vayan a consumir crudas deben lavarse muy bien y pelar.
  • Hay que utilizar guantes para manipular las frutas y verduras crudas o lavarse las manos, con agua caliente y jabón, después de hacerlo.
  • Durante la manipulación de las frutas y verduras, es importante evitar el contacto de las manos con la mucosa de la boca y los ojos.